CAFÉ PODEMOS

 Había una vez un honrado obrero llamado Juan que llevaba trabajando 40 años para la empresa FALSADEMOCRACIA S.A. resultó que con la crisis la empresa se vio obligada a hacer un ERE dejando a nuestro protagonista en la calle con cuatro duros. Con más de 50 años nadie lo quería contratar y en un alarde de valentía Juan decidió hacerse emprendedor, montando lo que la mayoría de emprendedores en España; un negocio de hostelería. “CAFÉ PODEMOS” le llamó, una cafetería totalmente nueva, en el centro de la ciudad, en un lugar inmejorable para captar clientes, vamos un negocio redondo.
 Había invertido los ahorros de toda una vida en Falsademocracia y creyó que justamente ya le había llegado la hora de descansar, así que Juan se relajó. Contrató a unos buenos camareros, los puso al frente del negocio, les dijo cómo quería que atendieran a la clientela y se limitó a ir al final del día a hacer caja.
 Pasados unos meses Juan no entendía nada, su negocio se iba al garete, el local era bueno grande y nuevo, y estaba en una zona con mucha clientela potencial, pero el negocio no solo no producía sino que daba pérdidas. Juan culpaba de todo a los camareros ya que sus sospechas de que no trabajaban se veían confirmadas con lo que le contaban los dueños de los negocios cercanos que competían con el suyo el “CAFÉ BAR PSOE” y el “RESTAURANTE PP”; que si los camareros metían mano en la caja, que si traían a su novia constantemente al bar, que si eran unos delincuentes…. Al final por muchos cambios de personal que hizo, Juan tuvo que acabar cerrando el bar y perdiendo todo lo ganado en 40 años en Falsademocracia, pero lo que nunca se le ocurrió fue pasarse por el bar, ver que hacían sus trabajadores, atender el a los clientes, ver si los precios eran adecuados, idear nuevas formas de atraer a los clientes…. en una palabra implicarse.
Cada día veo más Juanes por ahí, de hecho yo soy uno de ellos. NO TENEMOS CULTURA DEMOCRÁTICA. Llevamos 40 años acostumbrados a que la democracia solo consiste en votar a un líder en quien no creemos realmente o cuyo programa sabemos que no va a cumplir y quejarnos luego durante 4 años en el bar. Nos ha aparecido una herramienta inmejorable para cambiar todo esto. Esta herramienta es Podemos, un partido creado desde abajo y abierto a todo el mundo. Pero que hemos hecho? Cuánto nos hemos implicado? Entre poco y nada ya os lo digo yo. Eso sí, lo de quejarnos en el bar lo seguimos haciendo muy bien. Escuchando la mierda que escupen los medios que llevan atontándonos 40 años, quejándonos de que todos son iguales, de que en podemos también son todos unos ladrones. Pero cuántos hemos ido a algún circulo alguna vez? En un año de vida y en un país con una cantidad enorme de parados la falta de tiempo no es excusa, máxime cuando aquí en Internet tenemos herramientas tan potentes como plaza podemos por ejemplo. Simplemente nos da pereza, pero como sigamos siendo perezosos serán otros quienes nos hagan la política y eso siempre es malo. Quienes sí se han implicado son quienes ya estaban en política (o movimientos sociales que es otra forma de hacer política a fin de cuentas), qué porcentaje de participantes en círculos o miembros de consejos ciudadanos no habían estado antes en política o movimientos sociales? habrá muchos pero en comparación al total de la población son muy pocos.
 No me gustan muchas cosas que pasan en podemos, pero también me considero culpable de ello en parte, más que nada por mi casi nula implicación. Aun así, de momento y salvo catástrofe natural siguen y seguirán teniendo mi voto no solo porque no me creo nada de las tergiversaciones de la prensa sino porque han sido los primeros que me han dado la oportunidad de implicarme en política sin tener ni idea de ello. Que yo no haya aprovechado esa oportunidad es problema mío.

 Retu Itator

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