¡¡ESTO SI QUE MERECE UN PACTO DE ESTADO!!

"Aguantamos con las velas, la radio y la estufita de gas hasta las diez. Llenamos las botellas con agua caliente y nos metemos en la cama hasta que amanece". Así viven Carmen y Rafael, y también sus dos hijos, Miguel -con una discapacidad psíquica del 68%- y Tamara, que hace un año dio a luz a Kevin. Como ellos, hay cuatro millones de españoles que están pasa...ndo este invierno sin apenas calefacción porque deben elegir entre mantener su casa caliente o satisfacer otras necesidades para las que no sirve ponerse el abrigo en el salón.

Carmen y Rafael no están en situación de exclusión social porque ahora tienen los 400 euros para dos sin prestación y las ayudas por Miguel. Pero cuando la crisis les partió la vida en 2010 y Rafael -autónomo- dejó de tener ingresos, comenzaron a tener problemas con las facturas. Hace un año les cortaron la luz.

Riesgo para la salud
José Luis López Fernández, miembro de la Asociación de Ciencias Ambientales (ACA), acaba de presentar el «Análisis de tendencias de pobreza energética 2014». Las cifras que manejan se basan en las Encuestas de Condiciones de Vida y de Presupuestos Familiares del INE, y en el barómetro del CIS. En ellas se ve que un 9% de la población española no pudo mantener una temperatura de confort en su vivienda. «El concepto de pobreza energético refleja la incapacidad de un hogar para pagar una cantidad mínima de servicios energéticos, entre los que están mantener a 21ºC la estancia principal y a 18 ºC las secundarias, que es lo que marca la Organización Mundial de la Salud», dice López Fernández.

Cuando el termómetro baja de esos límites, «afecta al progreso escolar y el bienestar y resiliencia emocional de los niños», dicen los informes, que también resaltan que «dobla la probabilidad de que sufran problemas respiratorios» e incluso ocasiona a los más pequeños «problemas para ganar peso, mayores tasas de ingresos hospitalarios y de síntomas asmáticos». En este sentido, López Fernández asegura que «la pobreza energética podría estar detrás de la muerte prematura de más de 2.000 personas al año».

A través del móvil de José Antonio, miembro de Alianza contra la Pobreza Energética, una asociación de la que forman parte colectivos como la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, Carmen sigue hablando desde su casa en Sant Boi de Llobregat: «Miguel lleva mejor lo del frío; no se queja aunque tuvo un principio de neumonía hace poco. Al pequeñín lo distraemos jugando, pero está con un resfriado muy fuerte y enseguida llora».

Cataluña es una de las comunidades en las que el tejido social se ha movilizado. El director de Intervención Social de Cruz Roja de Cataluña, Óscar Barbera, traslada al ámbito autonómico las cifras del INE. «Casi el 11% de las familias catalanas sufren pobreza energética. Y no son forzosamente desempleados. De hecho, hemos visto reaparecer algo que no se veía hace muchos años, la figura del trabajador pobre; alguien con un salario tan bajo que no puede sacar del umbral de la pobreza a su familia. Es un tema serio. Si no se mejora la ayuda, podría llegar a ser alarmante».

Esta transversalidad queda también reflejada en el informe de la Fundación Fomento de Estudios Sociales y Sociología Aplicada, impulsada por Cáritas Española. En él se aprecia que hay un 16,8% de hogares en situación de integración -no de exclusión- que tampoco pueden pagar la calefacción.

A diferencia de Francia o Reino Unido, en España ni siquiera se ha definido lo que es pobreza energética, aunque esta haya entrado a formar parte de las discusiones parlamentarias con varias proposiciones de ley y una mención en la ley de 2013 de rehabilitación y renovación urbana. «En ayuntamientos como los de Zaragoza y Barcelona, y algunos andaluces, se está trabajando -dice López Fernández- en acuerdos con las compañías para que al menos no se corte la energía si ya hay un expediente de ayuda abierto. Pero queda mucho por hacer».

Más margen para pagar
Carmen no para de repetir a lo largo de la conversación que ella puede pagar, pero no los más de 2.500 euros que debe y que le exigen para volver a darle la luz. «Intenté hablar con la compañía para que me diesen un margen pero no hubo forma. Les dije que tengo un hijo con discapacidad y un nieto pequeño. Y me dijeron que no era problema suyo». Por eso desde la Alianza contra la Pobreza Energética reclaman cambios para evitar situaciones dramáticas. Albert Pallás, otro de sus portavoces, se queja: «Es intolerable que no se garantice a familias en situación de vulnerabilidad el acceso a unos servicios básicos».

La bajada del crudo en los últimos meses debería ayudar, pero Barbera no se muestra optimista. «En 10 años la energía se ha encarecido más de un 50%, por lo que apenas se va a notar». Unas horas después, llega una nota de agencia: «Según Red Eléctrica de España, el recibo de la luz se ha encarecido un 3% en el mes de enero como consecuencia del mayor coste de la electricidad en el mercado mayorista».

Comentarios