“El País” reclama a Rivera y Marín que se sumen al pacto PSOE-PP. ¿Motivo? la presidenta en funciones de Andalucía, Susana Díaz, ha pedido al consejero delegado del Grupo Prisa, Juan Luis Cebrián, editor del diario “El País”, que presione a Albert Rivera y Juan Marín, portavoz de Ciudadanos en Andalucía, para que se sumen con su abstención a la investidura de la candidatura socialista. Tanto Podemos comoCiudadanos le han trasladado al PSOE que si quiere gobernar, los ex presidentes Manuel Chaves y José Antonio Griñán deben renunciar a sus escaños en el Congreso y el Senado y someterse a la justicia sin aforamientos para responder por el fraude de los ERE y el robo a los parados en los cursos de formación. A IU, que ha estado gobernando con el PSOE dos años, la corrupción de los dos ex presidentes socialistas no le importa tanto, ni tampoco al PP, que solo pide conservar las alcaldías de Málaga, Córdoba, Granada, Almería y Jaén con la recíproca abstención del PSOE en mayo, según adelantó “Espía en el Congreso”. Pero Susana busca un “atajo” y quiere gobernar Andalucía “gratis” con las abstenciones de todos los demás y sin ceder nada a cambio. Esta vez el pacto PSOE-IU no le llega para ganar la votación y el PP le ha dicho que se abstendrá, pero en la tercera votación, tras las elecciones de mayo y cuando compruebe que el PSOE cumple su parte del acuerdo facilitando la elección de los alcaldes conservadores con su abstención.
Ante esta difícil tesitura, Susana Díaz ha pedido socorro mediático al Grupo Prisa, siempre dispuesto a hacer favores de este tipo. Fuentes periodísticas de este grupo han desvelado queJuan Luis Cebrián, tras el cese del periodistaJesús Cintora en la Cadena Cuatro para contentar al PP, ahora hace lo propio con el PSOE: el editorial “Pactos y Populismos” advierte a Ciudadanos que debe entregarse a los socialistas en Andalucía: “De cómo resuelva la negociación para llegar a un posible pacto de gobernabilidad con el PSOE de Susana Díaz dependerá su futuro en el nuevo escenario de cuatripartidismo”. E insiste en que “en un entorno de ocaso de mayorías absolutas, los electores van a valorar a los políticos que sean capaces de dialogar y llegar a acuerdos razonables bajo la premisa de renuncias mutuas, asegurando las prioridades básicas de cada partido”.
Cebrián sugiere que Ciudadanos debe perdonar la corrupción de Chaves y Griñán con estas palabras: “antes de iniciar la ronda de conversaciones con la candidata a formar Gobierno en Andalucía, Ciudadanos ha dado ciertas muestras de populismo que no se corresponden con su posición en el mapa ideológico. Las frases grandilocuentes y los planteamientos demagógicos son más propios de Podemos. Tiene poco sentido que Ciudadanosocupe posiciones radicales o populistas que le pueden llevar a perder la decisiva situación de centralidad electoral que ha conseguido en tan poco tiempo. Hacer política es, hoy por hoy, dialogar y explicar lo que se defiende y lo que se decide”
El candidato andaluz de Ciudadanos, Juan Marín, había hecho público que se opondrá a la investidura de la futura presidenta andaluza,Susana Díaz, mientras Manuel Chaves y José Antonio Griñán mantengan sus escaños en el Congreso y el Senado. Marín compareció ante los periodistas tras mantener con Díaz el segundo encuentro de la ronda de contactos que ha iniciado la dirigente socialista, una reunión en el que el partido que lidera Albert Rivera se había mantenido en su anunciada posición. “No estaremos en el gobierno y votaremos en contra en la investidura de Susana Díaz, porque nada ha cambiado”, ha explicado Marín en rueda de prensa. La condición para negociar de este partido es la ya anunciada en campana electoral: Manuel Chaves y José Antonio Griñán, señalados en el caso de los ERE por el Tribunal Supremo deben abandonar sus escaños.
Teresa Rodríguez (Podemos) también ha pedido a Susana que Chaves y Griñán pierdan su aforamiento bajo el lema “tolerancia cero con la corrupción”, lo que según Podemos pasa por“acabar con la impunidad”. También le ha reclamado a la candidata socialista “responsabilidad social de las entidades bancarias que firmen convenios con la Junta y readmisión de personal en educación, sanidad y bienestar social, a través de la disminución de altos cargos y asesores políticos en las consejerías”. Para ello, los sanitarios, profesores y asistentes sociales despedidos tienen que volver a sus puestos de trabajo, que deben sufragarse con el dinero de los suprimidos altos cargos, asesores, fundaciones y organismos paralelos de la administración.
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